Los dispositivos móviles y el turismo

Muchas cosas han cambiado en los últimos años respecto a nuestra forma de comprar y contar nuestras experiencias. Lejos quedan aquellos tiempos en los que les dábamos la lata a nuestros amigos y familiares con las fotos y los vídeos de los viajes. Ahora, en cambio, se lo contamos en directo, minuto a minuto, como si de una retransmisión deportiva se tratara. Incluso hay quien hace un relato o resumen de lo vivido si tiene un blog abierto.

No hay duda, la conexión 3G nos ha cambiado la vida (otra vez) y los dispositivos móviles nos han puesto en una posición vulnerable, porque a nadie se le escapa que lo que pongamos en internet, en internet se queda para la eternidad, pero muy poderosa, porque todo cuanto nos gusta y lo que no, lo comunicamos casi en directo a todo el planeta.

Las empresas se han dado cuenta y no quieren quedarse atrás. La publicidad engañosa ha caducado o está apunto de desaparecer, porque de nada sirve ya engañar o maquillar sobradamente la realidad, en un santiamén te lo desmonta el primer cliente que llegue gracias a las redes sociales.

¿Cuál creéis que fue la razón principal del nacimiento de los community manager? Controlar lo que se dice de nosotros en internet y minimizar en lo posible los comentarios negativos. Claro que como todo, en su evolución han derivado en un oficio cuya misón principal es la de poner en contacto la empresa con sus clientes a través de las redes sociales.

Y ahí es donde quería llegar: los dispositivos móviles han propiciado como nunca el acercamiento y el entendimiento entre empresas y sus usuarios y clientes: gracias a las redes sociales nos conocemos más y mejor y las empresas están en posición de darnos aquello que buscamos o por lo menos intentarlo. ¿Saben ustedes que hay restaurantes y hoteles que cuando hacemos una reserva, lo primero que hacen es buscar en las redes sociales nuestro perfil para poder darnos el mejor servicio y así conseguir que cada cliente, por anónimo que sea, se sienta único e importante?

Otra cosa que se han dado cuenta las empresas es que los turistas y usuarios de servicios ya no quieren recibir un servicio, dormir bien o tener una comida estupenda, quieren vivir una experiencia, una experiencia no necesariamente acorde con su estilo de vida, pero sí con con su pensamiento o filosofía de vida. Esa es una de las razones por las que las empresas atan sus marcas a un mensaje: ¿os suena el desafío a los límites de esa marca de bebida energizante? ¿Y las campañas sociales de cierta bebida isotónica? Son sólo dos ejemplos, pero que nos sirven para ilustrar un fenómeno reciente en el marketing: el love marketing. Con el marketing de contenidos, la empresa busca la fidelización de su marca mediante la proximidad de pensamiento y sentimiento con sus clientes. Pero eso da para otro artículo que escribiremos otro día no muy lejano.

¿Y cómo consiguen comunicar todo eso? ¿Cómo consiguen hacer llegar todo eso a sus clientes, reales y potenciales? Exacto, a través de las redes sociales y de la inmediatez de los dispositivos móviles.


El turismo ¡qué gran invento!